Más conocido como quiropodia, es el tratamiento llevado acabo por los podólogos para prevenir y tratar cualquier afección que los pacientes pueden presentar en consulta.

Empezando desde la inspección óptica del pie para valorar las necesidades de cada paciente, pasando por el tratamiento de lo que se haya visto, corte de uñas, limpieza de durezas, eliminación de callos,…

Para acabar con un fresado que suavice piel y uñas para eliminar el mayor número de impureza posible. A continuación se hidrata el pie para mantener la flexibilidad de la piel.

Durante el tratamiento pueden advertirse afecciones en la piel y uñas de las que se valorará el tratamiento a seguir , pautándolo y realizando el seguimiento necesario que el profesional estime.

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